La motivación es lo que está detrás de nuestras acciones diarias y objetivos. Esta puede ser externa (como otros te verán, lo que pensarán de ti) o interna (como tú te ves a ti misma y lo que solo ves tú y te importa a ti).
Cuando nos motivamos, hay una expectativa detrás. Por eso hay que ir con cuidado. Siempre hay que hacerlo desde el despego.
La pirámide de Maslow intenta explicar qué impulsa la conducta humana. En el siguiente diagrama os muestro los aspectos que se ven condicionados por los TCA.
Hay 5 niveles:
La motivación es necesaria para alcanzar tus metas. ¿Cómo la podemos conseguir? Te dejo algunos consejos para que la trabajes a tu ritmo.
1.PIENSA EN POSITIVO, NO PIERDAS LA ESPERANZA
Tus pensamientos van a influir en las acciones que realices. Si afrontas cada día como retos y con visión positiva serás más capaz de avanzar hacia tus metas. Eso sí, permítete sentir cualquier emoción; estar mal y sentirse mal también forma parte del aprendizaje. Pero recuerda que tu discurso interno es uno de los factores clave a la hora de motivarte.
2. ELABORA UN DIARIO PERSONAL CON TUS PROGRESOS
Elaborar un diario con cada uno de tus retos te llevará a motivarte más para lograr el objetivo y, además, te hará tomar más consciencia de los progresos que hagas a corto plazo. Así, podrás detectar que tus esfuerzos están dando tus frutos y conseguirás esas mini-metas que te supondrán un aliciente para seguir batallando.
3. VISUALÍZATE LOGRANDO TUS PROPÓSITOS
Un truco psicológico es visualizar mentalmente el resultado que deseas alcanzar, en tu caso, la RECUPERACIÓN TOTAL, durante varios minutos y con muchos detalles. Simplemente cierra los ojos y disfruta percibiendo ese momento de éxito. ¿Cómo te sentirías? ¿Con quién compartirías tu alegría?
4. PEMÍTETE FALLAR
Por muy autoexigente y perfeccionista que seas, por mucho que quieras recuperarte 100%, permítete fallar. La recuperación no es un camino lineal. Lo importante es que siempre tengas clara tu meta y no desistas. Eso sí, toma consciencia de esos fallos para que sean constructivos y te permitan seguir caminando.
5. PREPARA TU MENTE PARA MOMENTOS DE BAJÓN
Ser realistas es esencial. Todos tenemos días mejores y días peores. Tener herramientas para gestionar nuestros pensamientos y emociones es fundamental. El yoga es una práctica de autodesarrollo que te brinda numerosas técnicas y métodos para que cuando estés en estos momentos te sea más fácil ver la luz.
6. HAZ UNA LISTA CON TUS RAZONES PARA SEGUIR MOTIVADA
Si conoces los motivos que te empujan a seguir tirando del carro y esforzarte día tras día, tienes mucho ganado. La motivación tiene que ser algo intrínseco, que dependa de ti, en el sentido más individual, ya que si dejas que sea principalmente extrínseca, en el momento que algo de tu exterior fluctúe, te vendrás rápidamente abajo. Escribe en un papel cuáles son tus motivaciones y las causas.
7. BUSCA APOYO EN UN BUEN CONSEJERO
Cuando persigues una meta, es posible que otras personas ya lo hayan logrado antes que tú. Contar con el apoyo de alguien con experiencia puede ser clave para que te explique algunos trucos y reflexiones para que logres tus propósitos. Puedes buscar cursos, seminarios de esas personas. No conviene desperdiciar el conocimiento. Fíjate en quienes innovan y buscan nuevas formas de resolver los problemas.
8. DESCUBRE TUS VERDADERAS PASIONES E INSPÍRATE CON LAS PEQUEÑAS COSAS DEL DÍA A DÍA
Cuando descubramos lo que nos apasiona y lo que nos hace felices, nuestra motivación intrínseca nos permitirá afrontar la tarea y el día a día de un modo más efectivo. Disfruta de los pequeños detalles cotidianos. La inspiración está donde tu quieras verla y encontrarla.
¿Te ha gustado esta publicación? Déjame en los comentarios si pones en práctica algunos de estos tips o cualquier otra duda sobre la motivación. Te leo 🙂